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Cuando un consumidor necesita adquirir un repuesto para un producto como podrìa ser un computador, vehículo, electrodoméstico, etc., le surge una pregunta importante: ¿debería elegir un repuesto original OEM (Original Equipment Manufacturer) o uno genérico (OEM compatible)? Aunque los repuestos genuinos OEM suelen ser más costosos, no siempre está claro qué ventajas justifican ese precio más alto ni cuál debería ser la mejor decisión a tomar. Por ello el dilema es de vital importancia. Trataremos en este artículo de dar algunas pinceladas sobre este tema, que no deja de ser muy amplio.
Los repuestos originales son respaldados por la marca del producto, lo que asegura una calidad que cumple con sus estándares.
Los repuestos OEM están diseñados específicamente para el producto en cuestión, garantizando una compatibilidad perfecta.
Al comprar un repuesto original, el consumidor puede contar con el soporte y la garantía directa del fabricante, lo que puede ser una tranquilidad adicional.
Los repuestos genéricos suelen ser mucho más económicos que los originales, lo que puede representar un ahorro significativo para los consumidores.
Los repuestos genéricos son más fáciles de encontrar y están disponibles en una mayor variedad de tiendas y proveedores.
Muchos repuestos genéricos son fabricados por los mismos maquiladores de la marca OEM, lo que significa que la calidad será la misma.
El principal inconveniente de los repuestos OEM es su costo, que puede ser prohibitivo para algunos consumidores.
Los repuestos originales pueden volverse obsoletos o difíciles de encontrar después de un tiempo, especialmente para productos antiguos.
Al optar por repuestos originales, los consumidores estarán atados a las políticas y precios del fabricante.
Muchos consumidores perciben los repuestos genéricos como de menor calidad, lo que puede influir en su decisión de compra.
Los repuestos genéricos no vienen con la garantía oficial del fabricante del producto original, todo lo contrario, lo que puede ser una preocupación para el consumidor.
Debido a los avances tecnológicos, fabricar productos en un mercado competitivo y de bienes masivos requiere un conocimiento profundo de las tecnologías involucradas en cada componente. Esto hace que sea prácticamente imposible para un fabricante producir, de manera económica y eficiente, todas las piezas necesarias para su producto final. De aquí nace la necesidad de encargar a múltiples fabricantes (maquiladores) la elaboración de muchos de los componentes que integran el producto final. Las empresas maquiladoras son aquellas, en la mayoría de los casos, independientes del fabricante del producto, que se han especializado en el desarrollo y fabricación de alguno de los elementos que forma parte integral del artículo que proyecta ensamblar. Este sería el caso, por ejemplo, de un fabricante de discos duros a quien el ensamblador le ordena un lote de un disco duro específico, para entregárselo con la respectiva etiqueta de su marca.
Tomemos algunos ejemplos: un fabricante de automóviles no encontraría rentable producir las llantas, bujías, inyectores o parabrisas de sus vehículos. Del mismo modo, un fabricante de computadoras no sería competitivo si se dedicase a fabricar procesadores, memorias o discos duros en sus propias instalaciones. ¿Y qué decir de una marca de aviones que intentara fabricar directamente las innumerables piezas que componen sus productos? Hoy en día, los fabricantes son, en gran medida, diseñadores y ensambladores, y el porcentaje de piezas que producen directamente es cada vez menor. Pero cada elemento ordenado al maquilador, además de cumplir con la calidad y característica exigidas, debe venir con la etiqueta o marca del fabricante, lo que lo convierte en un producto original OEM; cuando el maquilador produce ese mismo elemento para sacarlo al mercado, lo hace con su propia marca o como genérico o OEM compatible.
Además de diseñar y ensamblar sus artículos, los fabricantes se enfocan en posicionar su marca en el mercado, para lograr un reconocimiento que les permita obtener mayores márgenes de ganancia. Es el caso de marcas muy reconocidas de ordenadores que comenzaron como ensambladores de “clones” y construyeron su reputación a partir de la estrategia del posicionamiento de marca. Empezaron ensamblando sus equipos con partes de muchos fabricantes y a medida que aumentaron sus órdenes fueron exigiendo colocar la etiqueta de su marca en cada componente.
Cuando un fabricante diseña un producto final, enfrenta decisiones clave sobre las especificaciones de los componentes que encargará a los maquiladores. Debe definir cuáles tendrán características genéricas, compatibles con otros productos del mercado, o si por el contrario serán exclusivas para sus propios productos. Los componentes con especificaciones únicas y especiales que solo le servirán al fabricante diseñador, se conocen como “propietarios”.
Por ejemplo, se consideraría propietario un disco duro que sea diseñado por un fabricante de marca, con dimensiones físicas distintas al estándar del mercado (como 3.00″ en lugar de 2.5″) o con una interfaz de conexión especial, que funcione únicamente con sus propias placas madre. El maquilador lo elaboraría siguiendo sus directrices y ese disco solo se utilizaría en la referida marca. Aunque este tipo de personalización le da exclusividad al producto, aumenta al mismo tiempo los costos de fabricación, “obligando” a los usuarios a adquirir necesariamente esos repuestos a los precios que la marca establezca, y las consecuentes ventajas o desventajas que esta política pueda traer.
De todas maneras, en el mercado actual de computación, los fabricantes con productos propietarios son cada vez menos. La tendencia es hacia la estandarización de los componentes, lo que permite que múltiples maquiladores produzcan piezas que cumplan con especificaciones comunes y en consecuencia, más económicas. Al mismo tiempo, los maquiladores fabrican iguales componentes para diferentes marcas y, estas marcas a su vez, ordenan a distintos fabricantes la producción de un mismo componente. Estos repuestos se diferenciarán únicamente en etiquetas y logotipos que ordenan colocar las marcas respectivas. En consecuencia, y como existe la demanda, los maquiladores seguirán produciendo el repuesto genérico (OEM compatible), con su propia marca, a un precio mucho más accesible.
El caso de las baterías y algunos otros componentes de los portátiles suelen diseñarse como “propietarios” porque la forma física, dimension, peso, etc., es un diferenciador competitivo muy importante entre los ensambladores. Por esta razón existe una gran cantidad de números de partes de estos elementos en el mercado. Podría decirse que una parte por marca y modelo, que no son intercambiables entre marcas y pocas veces entre modelos de la misma marca.
Aunque este tema tiene “mucha tela que cortar”, enfoquémonos en el mercado de las baterías de los portátiles. En Colombia, muy pocos consumidores se atreven a adquirir baterías compatibles, principalmente por desconocimiento o desconfianza. Lo que muchos no saben es que, cuando un fabricante lanza un nuevo modelo de portátil, ordena a su maquilador un número limitado de baterías suficiente para cubrir la demanda durante un plazo de tiempo determinado, siguiendo las leyes comerciales del país de origen; entonces, además de las unidades ordenadas por la marca, los maquiladores fabricarán un número adicional que competirán como “compatibles”, a un precio inferior, siendo exactamente iguales a las originales, pero sin la correspondiente etiqueta de la marca.
Por desconocer estas circunstancias, muchos consumidores enfrentan a la dificultad de romper el paradigma de la marca. Por ejemplo, si alguien necesita una batería para su dron, probablemente pagará más por una batería OEM, pensando que tendrá mejor calidad o que el fabricante responderá en caso de problemas. De esta manera, esta creencia es aprovechada por las marcas para justificar precios más altos y obtener mayores márgenes de utilidad. Un director de IT, muy difícilmente adquirirá baterías OEM compatible para los portátiles de la empresa.
Los consumidores no analizan que, si existen baterías genéricas en el mercado, es porque hay demanda para ellas y que deben ser elaboradas con altos índices de calidad para mantenerse en el mercado de las baterías compatibles.
Las baterías de portátiles no están estandarizadas porque no sería posible acoplarse a las dimensiones de los portátiles que produce cada marca, a diferencia de las baterías como las AA, AAA, C o D, que pueden usarse en cantidad de dispositivos, como por ejemplo los juguetes, artículos del hogar, etc. Cada modelo de portátil se diseña con batería de características físicas únicas. Sinembargo y debido a gran volumen de ventas de algunos modelos y marcas de portátiles, hay fabricantes de baterías que las producen con su propia marca y respaldo de garantía, dando de esta manera una mayor seguridad al consumidor y con ello a otra opción de compra.
Otro aspecto que pocos consideran es el impacto del tiempo de almacenamiento en la vida útil de una batería. Al comprar una batería original mucho tiempo después del lanzamiento del equipo, es posible que esté almacenada durante años, lo que reduce significativamente su rendimiento y vida útil, mientras que las compatibles, probablemente fueron fabricadas más recientemente a la fecha de la compra, lo que aumenta sus probabilidades de ofrecer un mejor desempeño y mayor vida útil.
Además, en algunos países donde las regulaciones sobre derechos de autor y marcas registradas no son estrictas y suelen no respetarse, los fabricantes de baterías compatibles no enfrentan problemas al imprimir etiquetas idénticas a las originales. Por esta razón, al solicitar una batería OEM, el cliente podría estar recibiendo una batería compatible sin saberlo, ya que no habría una forma clara de diferenciarla. Incluso si la batería es verdaderamente original, su tiempo de almacenamiento podría haber reducido su vida útil.
La elección entre piezas genuinas y compatibles depende de tus necesidades específicas, presupuesto y el tipo de dispositivo que posees. Si valoras la calidad y la confiabilidad, las partes genuinas son la opción más segura, aunque a un costo más alto. Sin embargo, si estás dispuesto a investigar y considerar opciones que pueden ofrecer la misma calidad a un precio más accesible, las partes compatibles pueden ser una alternativa viable.
No obstante, para quienes están informados, optar por repuestos compatibles puede representar un ahorro significativo sin sacrificar calidad o rendimiento.
En Lacomex SAS, entendemos que estas decisiones pueden ser complicadas, especialmente para aquellos que no están familiarizados con los detalles técnicos de los repuestos. Por eso, ofrecemos una asistencia personalizada y asesoría adecuada para ayudar a tomar la mejor decisión en las compras.
Al adquirir tus partes y repuestos con Lacomex SAS, no solo obtendrás productos de calidad, sino también la tranquilidad de contar con el respaldo de una empresa con más de 43 años de experiencia en el mercado. Nuestro conocimiento y trayectoria, junto con nuestra experiencia como servicio autorizado en reparación y mantenimiento de equipos, nos permiten garantizarte la mejor opción para tus necesidades.
Si decides optar por adquirir partes y repuestos con nosotros, puede estar seguro de que recibirás el mejor consejo y el respaldo porque somos una empresa comprometida con la calidad y la satisfacción de nuestros clientes.
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